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A profundidad
23/05/2025

Aprender a vivir en paz

Crear una cultura de paz en Colombia no ha sido fácil, pero 40 profesores del país compartieron sus métodos para enseñarla. 

El primer intento de la profesora Maribel Aguirre de enseñarle a sus estudiantes sobre la paz no salió como esperaba. Era 2016 y el gobierno nacional citó a un plebiscito para que los ciudadanos ratificaran el Acuerdo de paz firmado con la guerrilla de las Farc. Esta profesora de la Comuna 5 en Medellín pensó hacer algo similar. 

 

El plan era que los estudiantes aprendieran sobre derechos humanos y conocieran diferentes aspectos del conflicto. Al final, se haría un plebiscito. Así sucedió, y ganó el NO. Para la profesora fue frustrante. 

 

 Encontrar la forma en que los jóvenes valoren una cultura de paz es un camino difícil, pero que vale la pena explorar. 

 

La paz nace del interior

 

Como Maribel, son muchos los profesores que, en todo el país, están intentando contrarrestar fenómenos como el reclutamiento forzado, el racismo, la exclusión, y la falta de desarrollo socioemocional o de proyecto de vida. 

 

Cuentan algunas de esas maestras que se trata de quitarle los jóvenes a los grupos armados y a la violencia

 

Por eso, en 2021 un equipo de investigadores de la Facultad de Educación de la Universidad de los Andes, compuesto por José Darío Herrera, María José Bermeo, Nicolás Aguilar y liderado por el profesor Gary Cifuentes, se propuso analizar las innovaciones educativas para la paz. 

 

Cifuentes, experto en innovación educativa desde hace más de 10 años, amplia su agenda de investigación con esta obra que trasciende el énfasis tecnológico para centrarse en innovaciones relacionadas con la construcción de paz. 

 

Estas innovaciones pedagógicas fueron encontradas dentro de las instituciones de departamentos como Meta, Chocó o Putumayo, que han soportado la pesada carga del conflicto.   

 

"La mayoría de estas innovaciones eran internamente inducidas, es decir, partían de los problemas que los mismos líderes educativos identificaban en sus territorios”, explica Cifuentes a propósito del análisis comparado sobre las 40 innovaciones con el que cierra este libro.

 

Durante un año, recibieron más de 70 experiencias de 10 departamentos colombianos, de las cuales seleccionaron 40. Los profesores, autores de las iniciativas, las describieron con la guía de los investigadores, quienes luego las sistematizaron. 

 

Allí estaba el trabajo de la profesora Maribel y la nueva búsqueda que había emprendido con sus estudiantes. 

 

 

Innovaciones educativas para la paz

Innovaciones educativas para la paz: una sistematización de experiencias en Colombia

Escuchar a los niños y jóvenes

 

La profesora Maribel pudo identificar que la estrategia antes de su plebiscito tenía un diseño pedagógico muy personal, y que no había escuchado suficientemente a sus alumnos. Por eso, vio necesario entender a los estudiantes: “Qué conciben ellos sobre la paz, sobre la violencia; comprender su cotidianidad. De eso nacieron nuevos proyectos”. 

 

También entendió que 10 % de la población de la Institución Educativa Presbítero Antonio José Bernal, donde trabajaba, era víctima del conflicto armado, y que en los informes oficiales puede que se revele la victimización infantil, pero los relatos de sus voces no se escuchaban. 

 

Por eso, las actividades se encaminaron a oír a los estudiantes y crear filminutos, relatos, y a la recolección y análisis de información. 

 

Ese es solo un caso de los que reúne el libro Innovaciones educativas para la paz: una sistematización de experiencias en Colombia, que tiene como compiladores al profesor Cifuentes y a Nicolás Aguilar Forero. El libro, en su versión digital, es gratuito y se puede consultar en la página de Ediciones Uniandes

 

 

Maribel Aguirre

La profesora Maribel Aguirre, de negro, junto a sus antiguos estudiantes de la Institución Educativa Presbítero Antonio José Bernal.

Gary Cifuentes

“Algo característico en estas innovaciones es que los líderes que las impulsan quieren ir más allá de un mero cumplimiento normativo a través de una Cátedra para la Paz. En este libro se evidencian los factores asociados a la sostenibilidad de iniciativas con enfoque territorial y pedagógico” – Gary Cifuentes.

Esta sistematización, explica Cifuentes, no es una mera descripción documental, sino un sistema que rescata de manera crítica el saber que viene de abajo, de las propias experiencias de las escuelas. Además, son únicas en el mundo, porque están atendiendo problemas específicos de esas comunidades. 

 

“Una sistematización permite recoger toda la riqueza cultural y el patrimonio pedagógico que hay en un territorio, y documentarlo de una manera tal que se puedan dar pistas sobre cómo sostener una innovación”, explica Cifuentes, profesor asociado de la Facultad de Educación de la Universidad de los Andes y doctor en Human Centered Communication and Informatics de la Universidad de Aalborg (Dinamarca).

 

Del análisis de las historias, que están divididas por región y temáticas, nació Transformaciones que perduran, otro texto que propone el “hexágono de la sostenibilidad”: seis variables determinantes para que una innovación se mantenga. Un paso para direccionar la transformación educativa, que no solo es necesaria en temas de paz. 

 

 

Una caja de herramientas

 

“La violencia produce miedo, ira, rabia, frustración, dolor, separación; desconecta, limita, nos encierra”, dice el profesor Hernán Córdoba, del departamento del Chocó y otro de los autores de Innovaciones . 

 

Dentro de las estrategias que ha aplicado el profesor Córdoba, están las abrazatones, una actividad en donde los estudiantes deben bajar la guardia para poder abrazar. Una acción que no es fácil en zonas de conflicto. 

 

El mismo Córdoba dice que en su labor como profesor, el reto es “no dejarse morir. Y no me refiero solo a la muerte física, sino a dejar que la adversidad lo encierre y que no encuentre posibilidades”. 

 

 

Hernán Córdoba

Hernán Córdoba, profesor de la Institución Educativa Isaac Rodríguez Martínez de la ciudad de Quibdó, Chocó.

 

Ese compromiso con las comunidades es una constante en las historias y uno de los aprendizajes del análisis de las experiencias. Para el investigador Cifuentes, un aprendizaje es precisamente la necesidad de “reivindicar el rol que tienen estos líderes como agentes, que van a movilizar las innovaciones más allá de algo que venga desde afuera”. 

 

Otra característica que resalta el análisis es la transversalidad de estas experiencias. La Ley 1732 de 2014 obliga a los establecimientos educativos del país a implementar espacios pedagógicos sobre valores, derechos humanos y resolución pacífica de conflictos, pero muchos se han limitado al aula y no han permeado la escuela y las comunidades como lo han hecho estas experiencias. 

 

Los testimonios de estas 40 iniciativas son una caja de herramientas o un catálogo de experiencias, donde los profesores de todo el país pueden conocer, por temática o por regiones, las actividades desarrolladas por otros docentes en contextos similares que se salen de la clase obligatoria. 

 

Este trabajo es un reconocimiento a los líderes que, desde las escuelas, buscan un país que aprenda a vivir en paz y con esperanza. Como dice el profesor Córdoba: “En el Chocó hay mucha tristeza, pero en medio de esa tristeza también está la esperanza y por eso trabajamos todos los días”. 

 

 

 

Innovaciones educativas para la paz: una sistematización de experiencias en Colombia 

Autores compiladores: Gary Cifuentes y Nicolás Aguilar Forero 

 Año de edición: 2025 

 Ediciones Uniandes 

El trabajo contó con el apoyo financiero del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, a través de la convocatoria 174 de 2021.