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Vida universitaria y comunidad
08/05/2025

Terrafest: la voz de las nuevas generaciones por la sostenibilidad

Estudiantes de Uniandes crearon Terrafest, un festival que une sostenibilidad, arte y acción para transformar el activismo ambiental.
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“Nuestra generación está en el momento justo para hacer un cambio significativo”,
afirmó Santiago José Navarro Flores, presidente de la Mesa Ambiental Uniandina.

Como muchos de sus compañeros, Navarro entiende que el activismo ambiental ya no es optativo: es una forma de habitar el mundo. 

 

En el marco del Día Internacional de la Tierra, estudiantes de distintas carreras dieron vida a Terrafest, un festival que convirtió la sostenibilidad en arte, diálogo y acción colectiva. 

 

 

Desde las primeras horas del día, el campus se transformó en un punto de encuentro para quienes sienten el planeta como una causa urgente y personal.

Terrafest —explica Navarro— nació para visibilizar el trabajo silencioso pero constante de los estudiantes comprometidos con el ambiente: 
 “Trabajemos juntos, desde nuestros saberes y capacidades, para dejar un mundo mejor”, invitó. 

 

Por su parte, William Blanco, vicepresidente de Finanzas de la Mesa Ambiental, hizo un llamado a actuar desde lo cotidiano: 
 “Si nosotros no hablamos de sostenibilidad, serán las próximas generaciones las que sufran las consecuencias”, advirtió. 

 

El arte también tuvo un papel protagónico. Ana María Rincón Rojas, egresada de Literatura, mostró cómo este puede ser una herramienta de impacto ambiental. A través de su emprendimiento, transforma materiales reciclados y estilos literarios antiguos en relatos que problematizan el consumismo: 
 “La poesía y los cuentos pueden sumar a la conversación medioambiental mediante la evidencia de hábitos consumistas”, señaló. 

Un diálogo que atraviesa disciplinas 

 

Los paneles académicos de Terrafest abordaron temas como la economía circular, la innovación tecnológica, la justicia ambiental y el valor del conocimiento local. Fueron espacios para repensar los límites entre disciplinas y construir desde el reconocimiento mutuo. 

 

“Superar el ego académico y escuchar los saberes comunitarios es esencial”, expresó Leonardo Parra, doctor en Transformación Urbana y Social del Laboratorio de Informática Urbana de la Queensland University of Technology. 

 

Se discutió cómo traer la complejidad de los problemas ambientales a las aulas no solo mejora la comprensión, sino que también ayuda a evitar la apatía y la inmovilidad frente a la crisis climática. 

El campus como laboratorio vivo 

 

Durante la jornada se creó un mercadillo sostenible con 16 iniciativas —entre ellas, WWF y varios emprendimientos estudiantiles— que demostraron cómo se puede emprender con conciencia ambiental. 

 

Uno de los espacios más concurridos fue el Swap, un punto de intercambio de ropa que motivó a repensar los hábitos de consumo desde una lógica circular. 

 

Todo el festival fue diseñado bajo criterios de sostenibilidad, priorizando la reutilización, el consumo responsable y la participación activa de la comunidad universitaria. 

 

Terrafest fue una muestra del espíritu transformador de la comunidad estudiantil, articulando ciencia, arte, tecnología y compromiso social con el medio ambiente. 

 

“Creemos en la educación que transforma, en la comunidad que actúa y en los jóvenes que se atreven”, concluyó Santiago Navarro.